El ayuntamiento de Santander a buscar más dinero de las motos.

Diario Montañes escribió:



Después del verano se aprobará la modificación de la ordenanza que regula la OLA y las motos tendrán, a partir de ese momento, plazas de aparcamiento en zona azul. Serán gratuitas en temporada baja, y podrán dejarlas allí sin la limitación temporal que imponen a los coches. Con esta acción se pone punto final a un vacío legal que permitía a estos vehículos aparcar en el espacio destinado a los coches, según la normativa inicial, que se redactó en 1997, sin abonar un pago.

Actualmente hay 10.783 motocicletas y 6.650 ciclomotores censados en Santander. En total 17.433 vehículos de este tipo que tienen que encontrar un modo legal de estacionar en una ciudad que dispone para ellos 2.304 plazas. Pero, ¿y si están llenas? Ahí llega el calvario para estos conductores, que se arriesgan a una multa de tráfico de 90 euros y la retirada del vehículo por parte de la grúa municipal (misma sanción que para un coche), si aparcar su moto en una acera, sobre un bordillo, o en cualquier otra ubicación no destinada al efecto. De ahí que hayan recurrido hasta ahora a utilizar la zona azul como un reducto alegal donde podían estacionar con el único peligro de encontrarse su moto dañada. Esta es la queja más común entre los conductores de ciclomotores, que ven cómo algunos usuarios o bien les mueven la moto o, simplemente, la golpean en la maniobra de aparque.

Según están trazadas las líneas, deberían aparcarlas paralelamente a la acera, pero ahí es cuando más perjudican a los coches, restando plazas que también para ellos cada vez son más escasas, con las recientes obras de peatonalización de la ciudad.

No obstante, en este convivir enrevesado de motos y coches, las cifras arrojan una realidad menos turbadora: en 2003, la Policía Local y los agentes de la OLA emitieron 108.333 denuncias, mientras que en 2009 éstas se redujeron hasta 48.361 multas. Concretamente, las multas por OLA también se han visto reducidas, casi a la mitad, en tres años. Han pasado de 45.538 en 2006, a 26.296 el pasado año 2009. Estas cifras indican que las infracciones van descendiendo, pero a pesar de ello, los usuarios demandan una solución para ambas partes.

Por ello, el Ayuntamiento de Santander está modificando la ordenanza reguladora de aparcamiento limitado en la vía pública con un doble objetivo. Por un lado se va a ampliar la zona de OLA a determinadas calles en las que las asociaciones de vecinos lo han solicitado, como el caso de Juan XXIII y Juan José Pérez del Molino, y el área interior de esas calles. «Estamos en la fase de convocar a las asociaciones vecinales para conocer si quieren implantar la OLA y dónde, concretamente», explica el concejal de Protección Ciudadana y portavoz de la Corporación municipal, Eduardo Arasti. Con ese borrador se llevará «a la oposición para que presenten sus sugerencias y de ahí se llevará a la comisión correspondiente para ya llevarlo a Pleno y modificarlo». Según los plazos que maneja el concejal, este trámite podría estar resuelto, si se supera la fase de alegaciones, en otoño.

Por otra parte, la modificación de la ordenanza se aprovechará para instaurar «en cada zona de la OLA un espacio determinado para las motos y los ciclomotores». Lo podrán hacer de forma gratuita, ya que no hay ninguna herramienta actualmente para que puedan realizar el pago (el ticket utilizado por los coches, y que se deposita en el interior de los mismos es, por ahora, la única forma en la que se abona la cantidad. Este método resulta, por tanto, inviable en el caso de los vehículos a dos ruedas, que no tienen forma de proteger ese justificante de que han realizado el correspondiente ingreso).

Cómo demostrar el pago

Ahora bien, según el borrador que maneja el Ayuntamiento de Santander, no podrán usar la zona reservada para los coches, y que hasta ahora sí que utilizaban. En caso de que lo hicieran estarían expuestos a una sanción, a no ser que hubieran sacado el recibo correspondiente y lo hubieran ubicado, como reza el artículo 15 de la ordenanza que dice que los conductores o propietarios de vehículos podrán estacionar los mismos en zonas señaladas, cumpliendo los siguientes requisitos: exhibir en la parte interior del parabrisas de una forma totalmente visible desde el exterior el ticket de estacionamiento o la tarjeta de residente.

«Las motos tienen derecho a aparcar ahí como un vehículo normal, pero al no haber un sistema para demostrar que pagan se habilitan las zonas para ellas. Si quieren usar las zonas de coches tendrán que colocar el recibo de alguna manera», explica Arasti.

Actualmente los únicos vehículos que quedan excluidos de la limitación del tiempo de estacionamiento y del abono del precio público correspondiente son los estacionados en zonas reservadas y especialmente señalizadas, para su categoría o actividad; un taxi cuando el conductor esté presente y se encuentre realizando la operación de carga o descarga de viajeros; los vehículos en servicio oficial, debidamente identificados, propiedad de organismos del Estado, provincia, municipio o entidades autónomas que estén destinados directa y exclusivamente a la prestación de servicios; los vehículos de Representaciones Diplomáticas acreditadas en España; los destinados a la asistencia sanitaria debidamente identificados.
También están excluidos los vehículos propiedad de minusválidos cuando sean conducidos por sus titulares y tengan visible la tarjeta de autorización especial expedida por el Ayuntamiento de Santander en las zonas expresamente reservadas para su categoría; y cualquier otro vehículo que acredite la necesidad de acogerse a este régimen excepcional y así se autorice.

http://www.eldiariomontanes.es/v/20100503/cantabria/motos-tendran-plazas-aparcamiento-20100503.html